¿Qué pasará cuando no haya residuos? La resiliencia ante una economía circular

El reciente informe presentado este mes por la Fundación Fórum Ambiental, alumbra las nuevas oportunidades que representa la economía circular para el sector público y para los gestores de residuos.

Como empresa tienes que pensar que pasará cuando tus productos no sean útiles y desde Imedes trabajamos en la búsqueda de soluciones que contribuyan a relanzar tu organización para alcanzar un futuro más resiliente, aspecto de vital importancia tanto en la economía empresarial como en la local. ¿Cómo? Integrando el concepto de sostenibilidad integral – económica, ambiental y social-, para entender, hacer y planificar las organizaciones y las ciudades de forma diferente. Forma basada en aproximaciones sistémicas e integrales, que permitan identificar y comprender las múltiples relaciones entre las componentes sociales, económicas y ambientales.

Venimos de celebrar la Semana Europea por la Prevención de Residuos (21-29 de noviembre de 2020) en la que se han dado a conocer estrategias de reducción de residuos y la política de la Unión Europea y de sus Estados Miembros en esta materia, se han fomentado acciones sostenibles para reducir los residuos, visibilizando las acciones llevadas a cabo por diferentes actores mediante ejemplos concretos de reducción de residuos, fomentando el cambio comportamiento cuotidiano de los europeos (consumo, producción…).

En este momento, en el que las tasas de vertedero están al alza y cada vez resulta más caro generar residuos, tanto por su gestión como por el desaprovechamiento de la materia prima utilizada, el gobierno estatal diseña un impuesto sobre los residuos, el cual gravará el depósito en vertedero y la incineración con un máximo de 40€/tonelada, que se reducirá hasta un 50% si los residuos se recogen separadamente. Aún está por definir como se combinará con los cánones y las tasas autonómicas sobre la materia, si bien no cabe duda de que nos encontramos ante una situación que empuja al sector productivo y a la administración a buscar la eficiencia y la reducción de residuos, y motiva la implementación de nuevas soluciones.

La circularidad requiere de un cambio de paradigma, y ello implica necesariamente concienciar a la ciudadanía en su compromiso con la sostenibilidad. El Informe de Fórum Ambiental, apunta que el comportamiento de la sociedad en conjunto dista mucho de ser considerado circular y que muchas prácticas de consumo habituales alimentan los modelos de economía lineal (consumismo, productos de un solo uso, despilfarro alimentario, no recogida selectiva…). El estudio plantea cuestiones como: ¿y si la creciente preocupación de los consumidores por la sostenibilidad se traduce en una ventaja competitiva para aquellas empresas que consigan la complicidad del público?, ¿y si los gestores de residuos pudieran incidir en los hábitos de consumo de la ciudadanía y con ello facilitar la aplicación de la jerarquía de gestión de los residuos, a la vez que reposicionarse y mejorar su imagen?

 “La circularidad requiere de un cambio de paradigma, y ello implica necesariamente concienciar a la ciudadanía en su compromiso con la sostenibilidad.”

Necesitamos ciudadanas y ciudadanos circulares. En este sentido, a la pregunta realizada desde Imedes a personas de muy diferente perfil sobre que es un/a ciudadan@ circular, se han obtenido respuestas interesantes como: “alguien que en su día a día adopta hábitos de consumo, repiensa el modelo desde la prevención y el hecho de no consumir por consumir”; “alguien que tiene en cuenta la circularidad de todas sus acciones en todo momento, es decir que es consciente del impacto que tienen todas sus acciones en todo momento”; “la persona que toma conciencia de sus hechos a cualquier nivel – económico, ambiental, emocional…-“; “una persona que traslada a su día a día, toda una serie de ideas de concienciación medioambiental, tales como un uso responsable del agua, electricidad, movilidad sostenible… siendo la clave el consumir menos”; o también “alguien que está sensibilizado en la economía circular basada en formas de producción que acaben revirtiendo en la sociedad desde la proximidad, ciclo integral de la economía desde el productor al consumidor”.

Desde Imedes, te ayudamos a diseñar la hoja de ruta para poder poner en marcha la transición hacia el paradigma de la circularidad. Si perteneces a la administración pública, a una empresa privada del sector residuos o al tejido productivo, contacta con nosotros y valoraremos como podría afectar la economía circular a tu modelo de negocio, así como qué acciones se deben adoptar para adaptarnos al nuevo modelo y conseguir un futuro resiliente para tu organización.